Los que están a tu lado
por Jose SalgadoUno de los mantras que se ha puesto de moda con esto del Mindfulness[1] es el vivir el aquí y el ahora. Parte de la premisa que como no podemos controlar el mundo hemos de dejar de volver nuestros esfuerzos en este ámbito y concentrarnos en modificar los pensamientos que nos genera la realidad, centrándonos en el presente actual sin que nuestra mente se escape a eventos pasados o futuros intentando reforzar el momento que vivimos, algo que tendemos a hacer cuando estamos pasando por una experiencia negativa.
Esta teoría puede ser útil, pero contempla un problema de resistencia que a veces nos plantea la realidad, ¿que ocurre cuando estás rodeado de personas que te roban la energía?, ¿personas que son tan negativas que fabrican yogures simplemente por el hecho de pasar al lado de un vaso de leche?.
No suele ocurrir, lo más habitual que si te toca convivir con una de estas personas en el trabajo exista una amplia mayoría con la que puedas liberarte de la lucha constante para no hundirte en la negatividad, pero como en botica, en las empresas hay de todo. Puede ser un departamento o quizás la empresa entera o incluso el sector, lugares dónde la rotación es tan alta que ya ni te acuerdas cómo se llamaba el que se sentaba a tu lado la semana pasada. El ambiente es denso, gris, pesado y las conversaciones que se suelen oír es que están todos hartos, cansados, que quieren marcharse, y ese goteo constante en horarios que se extienden más que las manecillas de un reloj hace mella incluso en las mentes más duras.
Estas situaciones te extraen tanta energía vital que lo único que quieres es llegar a casa, ducharte e irte a dormir, no tienes ni ganas de quedar con amigos, ver una película o hacer el hobby que siempre te ha gustado. Lo único que piensas es en dormir y que por algún truco de magia, el día siguiente sea fiesta.
Cuando la situación se prolonga en el tiempo lo más probable es que pasen una de estas tres opciones: primero te vas de la empresa, la segunda es que te pides una baja por depresión y la más desesperada es que acabas suicidándote[2]. De las tres, las menos interesantes por razones obvias son las dos últimas, pero como el mercado laboral está como está y todos arrastramos nuestras obligaciones financieras, no siempre podemos cambiar de trabajo e intentamos aguantar todo lo que podemos hasta que algo se rompe y el final no es al que nos tiene acostumbrado Disney.
Quizás te sientas identificado, y por saber más por viejo que por diablo, quizás te pueda servir algunos de los trucos que me han servido a mi para sobrellevar la situación y mantener una cierta salud mental, tanto para mí como para mi familia. En mi caso, sabiendo que no podía cambiar el entorno, lo que intenté es buscar las aficiones que me llenaban y sumergirme en ellas, sin dejar que mi cabeza usara esos espacios vacíos como cuando estamos en el sofá el agujero negro de la negatividad te absorba y te consuma.
Es complicado encontrar fuerzas para levantarse y hacer deporte, escribir, cocinar o salir con tus amigos cuando todo tu cuerpo está derrotado, pero es un proceso de pequeños pasos. No has de ceder y fozarte a hacerlo, al principio costará, te notarás más cansado, pero una vez coges el ritmo verás que estas actividades que siempre te han llenado te ayudarán a superar las malas vibraciones que te rodean y podrás aguantar. Y digo aguantar porque el objetivo no es plantearse una carrera de resistencia sino darte la energía para buscar opciones más saludables, como cambiar de empresa, lanzarte a montar la tuya o cualquiera de las opciones que estén en tu abanico de posibilidades.
Simplificando mucho y como decía mi hermano, lo que hay que intentar es generar estres positivo para contrarrestar todo lo que te vas cargando a la espalda.
[1] “¿Qué es la Atención Consciente o Mindfulness?” Respira Vida
[2] Cañas, Gabriela “La fiscalía francesa pide procesar a directivos de France Télécom por los suicidios de sus empleados” El País. 2016-07-07
También te podría interesar
Escúchalos a todos pero no hagas caso a nadie
Tu no eres Hannibal Smith y la vida no es un capitulo del Equipo A, asi que por mucho que te guste que los planes salgan bien, en raras ocasiones lo hacen.
Sensación de control
BI, Big Data, KPI, siglas que esconden datos forman parte de la tela que da forma al vestido que nos hace sentir como el emperador, todos saben que no tenemos ni idea de lo que está pasando pero nosotros, con el traje último modelo, miramos el número mágico que sale en el monitor y sonreímos, llenos de autoconfianza, y susurramos: menos mal que estoy aquí para que los planes salgan bien.
Entre el clavel blanco y la rosa roja, su majestad escoja
El lenguaje es algo poderoso, capaz de levantar pasiones, de llevar a las personas a ser la mejor version de si mismas o hundirlas en la mas profunda de las miserias. Es por eso que hay que escoger con sumo cuidado que palabras usas, como estructuras tanto tu discurso como las palabras.