Adiós internet, fue bonito mientras duró
por Jose SalgadoAcepto que los tiempos cambian, que lo que ayer era válido, hoy quizás ya no lo sea y probablemente por razones equivocadas. Cada vez me molesta más en lo que se está convirtiendo internet. Una red basada en protocolos abiertos: correo, web, etc… que han servido para crear uno de los mayores ecosistemas de comunicación que ha visto la humanidad. Hace ya mucho tiempo no existían foros, existían servidores de noticias, algo que a la mayoría quizás no le suene y corrían todos con el mismo protocolo y daba igual donde te conectaras porque la información se intercambiaba con todos los proveedores del mundo.
Ahora vemos como los foros son cada vez más cerrados y comparten menos información. Cada plataforma que aparece, lo primero que nos pide son todos nuestros datos y no para beneficio de la comunidad, sino para intentar monetizar su plataforma. Google, que nació como un buscador, ahora intenta forzar su plataforma G+ a base de meternos con calzador el resto de servicios como gmail, android, y lo que más le importa, chantajeándonos con la posición en su buscador en búsquedas.
Es lamentable ver como cada vez más se insiste en que escribamos con SEO en la cabeza, usar la densidad de palabras claves, las negritas, los encabezados, usar linkbuilding. Que narices tendrá esto que ver con comunicarse con otro ser humano, ¿de verdad que cuando habláis con una persona construís el mensaje pensando en SEO?.
Una tecnología que tenía el potencial de unir se está convirtiendo cada vez en nichos, en lugares cerrados donde nada se comparte, donde se fuerza a todos a pasar por el aro. Nuestro amigo Facebook, nos deja hacer páginas de empresa, invitar a toda la gente que podamos para que se apunten y publicitar nuestro lugar en esa red social. Se han gastado millones en colocar esa maldita URL en todos los anuncios, ¿y para qué?, para que ahora corte el flujo natural y tengamos que pasar todos por caja para llegar a nuestros fans que hemos atraído pagando de nuestro bolsillo. No es que me sorprenda, Facebook nunca ha sido una red social, siempre ha sido una empresa y ahora quiere monetizar. Está claro que los servicios gratis es un eufemismo de que te cobearán por otro lado.
Luego tenemos a los usuarios, que somos para como comer aparte. Ahora, posicionarse sobre un tema polémico te arriesgas a ser crucificado por prensar distinto. Da lo mismo que sea a favor o en contra, te van a lapidar. El resultado es que los fanáticos de una posición y de otra, se concentran en microfichas para darse la razón mutuamente e insultar a los del otro bando. Nadie, nadie que piense que quizás haya un punto medio puede sobrevivir en este medio, es sistemáticamente insultado y vilipendiado.
Cada vez más existe el buenrollismo más cercano a morderse la lengua que a hablar libremente porque entendemos la libertad como algo que solo se ha de respetar cuando es nuestro turno de palabra. Si estoy a favor del aborto, soy un asesino de niños, y si estoy en contra, soy un machista asesino y un ultracatólico. Si estoy en contra de la independencia de Catalunya soy un nazi y un franquista (como si no fuera casi lo mismo) y si estoy a favor soy un terrorista de Terra Lluire y un nazi (si, se puede ser también nazi en este lado de la ecuación).
Al final, te conectas a internet con guantes de látex, preparas contenidos excesivamente neutros e intentas pasar de puntillas sobre los temas que realmente importan, intentando destacar en otras que siempre provocan un sentimiento unidireccional: el típico niño de color que pasa hambre en algún país lejano de África, como si en mi barrio no hubieran gente que pasa hambre, pero sacarlo implica que o eres un nazi o un nazi. Otra jugada es poner gatitos y perritos monos, o hablar del posicionamiento de una web, o del social media, pero siempre evitando decir algo con cierta carga de profundidad intelectual y que nos haga pensar.
En serio, Internet puede ser algo más interesante que esto y de entrada, pasa porque nosotros tomemos conciencia de nuestra responsabilidad a la hora de dar nuestra vida a webs que viven de nuestros datos, a dejar que otros se puedan expresar a pesar de que no estemos de acuerdo, y lo más importante, recordando que si todos pensaran igual que tu, sobrarían todos menos tu… o quizás tu también.
¿Y que tiene esto que ver con la empresa?, pues la verdad, ni idea, ha sido un post que me ha salido de golpe, pero por conectarlo de alguna manera… las empresas deberían tener sistemas de comunicación eficientes e interconectados donde todos los departamentos puedan saber lo que ocurre en cualquier parte de la empresa y donde discrepar no sea sinónimo de carta de despido.
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