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¿La tecnología es neutra?
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Cuando las críticas contra la tecnología aparecen, uno de los argumentos más utilizados es que la ciencia es neutra, no tiene la culpa de que se use la tecnología nuclear, fisión o biología para fines más dignos de una película de terror que para crear un avance significativo para la humanidad.

El argumento es poderoso porque parte de que la ciencia es neutra y su único objetivo es avanzar y adquirir nuevos conocimientos, pero lamentablemente cada vez hay más pruebas de que no solo eso no es cierto, la ciencia está guiada a través de como se subvenciona y se potencia. De hecho, muchos científicos intentan añadir conceptos de moda en sus trabajos para captar más financiación -calentamiento climático, energía renovable o el mantra de moda en el momento. Sobre esta capa de presión que los científicos tienen a la hora de ser destinatario de fondos por parte de políticos, ellos mismos están en una carrera par ser los primeros, saltándose normas, procedimientos y usando técnicas estadísticas de dudosa legitimidad.

Así que no podemos afirmar que la ciencia es neutra, quizás lo es el conocimiento, pero el camino para adquirirlo está salpicado de intencionalidad, tanto personal como política.

Otro concepto que podemos añadir a que la ciencia no es neutra es algo que también pedimos a los políticos con escasa suerte, y a los directivos con más o menos el mismo resultado: accountability1. Es un concepto sajón que no tiene una traducción directa, pero más o menos todos entendemos su significado, y en ciencia, al igual que en muchas ramas de la empresa, no siempre se tiene en cuenta.

Volvemos al mantra de que la ciencia avanza, pero la pregunta es si avanza siendo responsable de lo que está descubriendo. Es decir, podemos descubrir como modificar el ADN, pero ¿estamos preparados como especie para aceptar las consecuencias de que lo que hemos descubierto?, y lo que es más importante, ¿revertir el proceso si nos hemos equivocado?. No, la ciencia simplemente avanza hacia adelante sin preguntarse por las consecuencias ni las implicaciones. Ella vive recubierta de una capa de imparcialidad, objetividad que estos pequeños detalles no pueden plantearse para detener su avance. Si podemos hacerlo debemos hacerlo, no hay ética ni preguntas al respecto, se hace y luego se desentiende de lo que ha puesto en manos de las sociedad y acto seguido busca la siguiente subvención para seguir avanzando, aunque no se sepa hacia dónde.

Sobre todo esto, hemos de empezar a aceptar que el concepto de que la ciencia avanza, como si fuera una línea recta es un mito que no se sostiene para cualquiera que haya estudiado un poco historia de la ciencia. La evolución se basa más en modelos que emergen, se consolidan y que tras un periodo de tiempo, aparece otra explicación de la realidad y es cuando se crean auténticas batallas, tanto por la financiación, como para publicar o para simplemente poder dar clases, y pasado un tiempo, una de las dos corrientes desaparece. Así que no es que no es que haya una sola dirección, sino teorías que luchan por sobrevivir del mismo modo que hay teorías económicas que intentan conseguir la supremacía teórica, que da acceso al control de los medios de publicación y las cátedras, que son al final las que dan acceso a los fondos, de los cuales los científicos se nutren.

Con lo que la pregunta que debemos hacernos, y es una pregunta complicada de contestar, no es tanto si la tecnología es neutra, sino aceptando que no lo es, ¿quién decide si se aplica o no?. Cualquier respuesta que puedo conseguir tiene argumentos en contra y a favor, sobretodo en una sociedad tan poco informada, un sistema tan corrupto y en un sistema de méritos científicos tan sesgado y dependiente de favores y subvenciones. En serio, no tengo una respuesta clara y contundente, pero lo que si tengo claro es que el argumento de la neutralidad ya no es válido, al menos para mí.


  1. Rendición de cuentas, responsabilidad. Linguee  ↩

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