La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, durante una rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros.

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, durante una rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros. Carlos Luján / Europa Press

Observatorio de la Energía

El traspaso de competencias entre la Comisión de la Energía y la CNMC siembra dudas en el sector

Temen que el calendario elegido abra la puerta a un 'cruce' de funciones en la tramitación de próximas normas clave como la retribución a las eléctricas.

4 abril, 2024 02:27

El Gobierno quiere tramitar con urgencia la Comisión Nacional de la Energía (CNE) para que esté en marcha a final de este año 2024. Así lo aseguró este miércoles Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco), quien remarcó que "facilitar el de tránsito a un organismo técnico y especializado es capital".

Sin embargo, el inminente cambio de competencias entre la nueva CNE y la CNMC está generando incertidumbre en el sector respecto a algunas normativas clave previstas. El organismo regulador tiene pendiente este ejercicio varias circulares de carácter normativo importantes, entre las que destaca la tasa de retribución financiera para las actividades de transporte y distribución de energía eléctrica 2026-2031.

El trámite de audiencia de esta circular se abrirá previsiblemente el 1 de diciembre de 2024, para que sea adoptada el 21 de octubre de 2025. Fuentes del sector energético temen que el calendario contemplado abra la puerta a un cruce de competencias entre la CNE y el organismo de Cani Fernández, que deberá ceder el testigo en el establecimiento de la nueva norma.

[Así será la nueva Comisión Nacional de la Energía que aspira a ordenar el sector energético ante la transición.]

La circular vigente rebajó en 2019 esta tasa financiera al 5,58% para 2020-2025, lo que generó numerosas reclamaciones de las empresas eléctricas. Competencia espera realizar a lo largo de los próximos meses determinados ajustes en la metodología de cálculo para adaptarla a los retos de la transición energética, posibilitando la inversión eficiente en redes. 

Para el Gobierno es importante que "las decisiones no se tomen únicamente desde un prisma de competencia", tal y como aseguraba el miércoles Ribera. "Es conveniente que el establecimiento de la esperada retribución eléctrica se lleve a cabo por un único organismo, y no por ambos", aseguran fuentes sectoriales a este medio.

Pese a los conflictos que pueda generar la fórmula y los tiempos del traspaso de funciones, para algunos actores del sector energético la recuperación de la CNE se plantea como solución a la desafección por parte de la CNMC, que precisamente se ha traducido en una reducción en los últimos años en la tasa de rentabilidad del negocio regulado. 

La CNE estará adscrita al Ministerio de Transición Ecológica y desempeñará funciones regulatorias, consultivas y de asesoramiento, así como la resolución de conflictos entre operadores.

Situación política

La situación de incertidumbre política -en un escenario marcado por los escándalos del caso Koldo y la renuncia del Gobierno a los Presupuestos Generales del Estado 2024 por el adelanto electoral en Cataluña- comprometen la estabilidad necesaria para sacar adelante la regulación pendiente en materia energética.

En este contexto, la posible marcha de Ribera a Bruselas como comisaria europea podría acelerar los nombramientos en la Comisión de la Energía. Sin embargo, según dijo ayer la ministra, la decisión todavía no está tomada. "Estar aquí o allí depende de un consenso en el partido y de una valoración de mi presidente, que creo que todavía está haciendo una valoración en conjunto", comentó.

Al igual que la CNMC, el nuevo ente estará integrado por siete miembros: el presidente, el vicepresidente y cinco consejeros. Tendrán un mandato de seis años sin posibilidad de reelección. Son varios los nombres que suenan en las quinielas de la presidencia del nuevo ente, entre los que destaca Mariano Bacigalupo, marido de Teresa Ribera. 

La nueva Comisión Nacional de Energía se quedará con la actual sede de la CNMC, ubicada en la calle Alcalá de Madrid, tal y como publicó EL ESPAÑOL-Invertia en febrero y confirmó el miércoles Ribera. Además, la actual plantilla de Competencia, tanto directivos como personal, que trabajan en el área de Energía serán traspasados a la nueva CNE.

La CNMC dio el mes pasado su visto bueno con una amplia mayoría, aunque con un voto particular del consejero Carlos Aguilar, al anteproyecto de Ley del Gobierno por el que se restablecerá la Comisión de la Energía. Eso sí, propuso recuperar el sistema de financiación a través de tasas establecido para la extinta CNE.

Además, planteó mejoras en relación con la independencia de la CNE, para la que se propone una mayor capacidad de autoorganización, la mejora de su autonomía financiera y presupuestaria y su participación en los procesos normativos de atribución de nuevas funciones.