China está dejando de ser un fabricante de productos baratos para convertirse en uno cuyo prestigio simboliza la calidad y el liderazgo tecnológico, según Allianz Global Investors.
La tardía reapertura de China a principios de año después de las draconianas restricciones para hacer frente a la pandemia de Covid-19 generó en el mercado unas altas expectativas de reactivación económica que apenas se sostuvieron cuatro meses. Desd
Para seguir leyendo hágase Premium
Pruébelo por 1€ el primer mes
y disfrute de acceso ilimitado a todo el contenido web de Expansión
O suscríbase con su cuenta de Google en dos clics