La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en una foto de archivo.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en una foto de archivo. Europa Press

Política 23-J

El PSOE ofrece una nueva financiación autonómica a ERC y Junts sin contar con el PP

La necesidad de recopilar los votos independentistas hace que Sánchez impulse una especie de pacto de Estado de "la España plurinacional".

2 agosto, 2023 02:39
Alberto D. Prieto Eduardo Ortega Socorro

Cuando María Jesús Montero sugirió, el pasado lunes, que era posible discutir sobre una condonación de la deuda de Cataluña con el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), la financiación de las CCAA entró de lleno en la negociación de apoyos para la investidura de Pedro Sánchez. Así, la oferta se vuelve ya una realidad en las negociaciones de los socialistas con sus socios, especialmente ERC y Junts, para rearmar la financiación autonómica en favor de los separatistas catalanes, que son los que cobran más caros sus apoyos. 

Los necesarios votos nacionalistas e independentistas de PNV, Bildu, BNG, ERC y Junts -además de los partidos localistas incluidos en el previsible socio de coalición, Sumar- armarían una especie de pacto de Estado de "la España plurinacional", al margen del Partido Popular, la otra formación con opciones de Gobierno y, de hecho, la ganadora de las elecciones. La marginación del PP en esta negociación podría ser incluso total, más allá de la mayoría absoluta de los de Alberto Núñez Feijóo en el Senado.

Así lo confirman fuentes jurídicas consultadas por este periódico, que recuerdan que para reformar o sustituir la ley de financiación vigente (la 22/2009, de 18 de diciembre) basta la mayoría absoluta en el Congreso y la simple en la Cámara de representación territorial... aunque si este rechaza la norma, la Cámara Baja levantaría el veto con la misma mayoría absoluta con la que habría aprobado esa ley orgánica.

En la pasada legislatura, este elemento nunca se sometió a los juegos políticos para armar mayorías, de modo que su entrada en el debate debe entenderse como un primer guiño a Junts y, a la vez, un primer paso para cimentar la agenda de Carles Puigdemont. Así, el concepto de la "plurinacionalidad" es el más repetido por todos los socios con los que presuntamente pactará Sánchez, hoy presidente en funciones, para repetir en la Moncloa. 

De esta forma, una quita -parcial o total- de la deuda catalana con el Estado sería el elemento clave para tener el permiso de los independentistas para abordar la "urgencia de esta legislatura", que confirmó este martes Montero que es la financiación autonómica. De hecho, las regiones que más años llevan reclamando su infrafinanciación vienen de gobiernos con signos políticos muy distintos.

Más que los fondos europeos

El montante total de la deuda de las autonomías con el Estado es considerable. En total, son unos 187.029 millones de euros, más de la mitad de la deuda regional total (322.211 millones).

Para tener en cuenta la dimensión de esta cantidad, supera los fondos europeos que, tanto en formato de ayudas como de préstamos, acabará recibiendo España -si cumple todos sus compromisos- a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Incluso si se suma el Plan RePower EU, el total estará en el entorno de los 150.000 millones de euros. Por debajo de lo que las regiones deben al Estado.

Sin embargo, la morosidad va por territorios. La región con mayor deuda, con diferencia, es Cataluña, con 71.852 millones de euros; le sigue la Comunidad Valenciana, con 46.274 millones, y Andalucía, con 25.276 millones. De hecho, el 84% de la deuda catalana es con el Tesoro español, junto con la Región de Murcia. Aunque con un montante mucho menor, de los 11.506 millones de deuda murciana, también el 84% es con el Estado.

En este peculiar ranking vuelve a figurar también Comunidad Valenciana, con el 83% de su deuda en manos del Estado. Curiosamente, se trata de tres regiones -de signos políticos diferentes hasta hace bien poco- que habían forjado alianzas para pedir cambios en la financiación autonómica, dado que se consideran infrafinanciadas por el sistema, tal y como ha admitido la ministra Montero.

[El PP vetará en el Senado cualquier pacto entre Sánchez y Puigdemont que afecte al Estatut catalán]

En el otro lado de la balanza están las regiones que han liquidado su deuda con el Estado y ya no recurren a fondos como el de Liquidez Autonómica (FLA), que las autonomías morosas emplean para poder devolver los préstamos al Estado. Éste es el caso de Madrid, Navarra y País Vasco.

Comunidad Valenciana

Carlos Mazón no quiere creer que Sánchez cambie los votos de Puigdemont por dinero de todos los españoles. El presidente popular de la Comunidad Valenciana lo quiso calificar de "rumor", en declaraciones a EL ESPAÑOL. Pero tanto él como Compromís -oposición en Les Corts, integrado en Sumar y también defensor de condonar "la deuda histórica"- aprovecharon para reclamar "una solución a la histórica infrafinanciación" que "haga justicia por todo este tiempo" con la situación valenciana, informa Juan Nieto.

Pero si éste termina por ser el elemento clave para rearmar la mayoría del Gobierno progresista, cree Mazón, se pondría en juego otro de los grandes consensos históricos de la democracia española: los acuerdos transversales (en lo político y en lo territorial) para los cambios en la financiación autonómica. "Estoy a favor de que se compense a la Comunidad Valenciana, que se estudien las fórmulas, pero ni un paso atrás", manifestó. 

Las CCAA populares salieron este martes en tromba contra el plan del PSOE, acusando a Sánchez de querer comprar su investidura con los Presupuestos del Estado. También algunas socialistas: con sordina en Castilla-La Mancha y más libremente el barón aragonés ya de salida, Javier Lambán.

El entorno de Fernando Clavijo, presidente del Gobierno de Canarias, se limitaba a recordar a este diario que esta presunta negociación del PSOE con Junts, de sustanciarse, podría poner en riesgo la previsión de ingresos de todas las regiones a través de los Presupuestos. "Venimos reclamando años la reforma del sistema, que es injusto", añadía una portavoz... 

Pero en general, todas las autonomías se ponen ya a la cola para preguntar qué habría de lo suyo. 

Comunidad de Madrid

Desde el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso se destaca que la gran duda que subyace de condonar la deuda de una Administración pública como la catalana sería qué clase de imagen se lanza a los mercados. Y más aún, al resto de comunidades autónomas como Madrid

"Sería una señal muy grave sobre la solvencia de una administración española sobre sus obligaciones, especialmente en materia de deuda", detalla Rocío Albert, consejera madrileña de Economía, Hacienda y Empleo, en conversación con este diario. "Sería crear una especie de mutualización de la deuda a cuenta del Estado a costa de todas las comunidades autónomas y demostraría que el PSOE está dispuesto a todo con tal de seguir en la Moncloa", añade.

Esta "distorsión", como la definen algunas Albert, supondrían una especie de "barra libre de gasto [...] y un endeudamiento exponencial" sin que las comunidades quieran asumir sus responsabilidades. Informa I. P. Nova.

Andalucía

"Poner precio al apoyo de los partidos independentistas a Pedro Sánchez en la investidura", eso es lo que está haciendo la ministra María Jesús Montero con su propuesta para condonar la deuda de las Comunidades Autónomas con el Estado a juicio de la titular andaluza de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España

La consejera insiste en que el modelo de financiación -"un balón de oxígeno para un proyecto de perdedores"- ha sido muy lesivo para Andalucía, a la que califica como "una comunidad que ha dejado de ingresar alrededor de 1.000 millones de euros cada año que le correspondían en función de su población". Por ello, cree que ahora, que vuelve a necesitar a los independentistas, anuncia nuevas prebendas en el marco de una hipotética reforma del sistema de financiación.

"No permitiremos nuevos agravios", asevera la consejera. Tampoco quiere que se le siga "castigando", por lo que insta a la ministra a que convoque el Consejo de Política Fiscal y Financiera y se debate con lealtad entre toda las comunidades. "No pueden negociar nada de forma bilateral con Cataluña", añade. Informa Inma León.