El avance de la tecnología a través del uso de robots ha hecho que varios de los trabajos en Puebla dejen de emplear personas para dar paso a las máquinas.
Uno de estos ejemplos es la industria automotriz que en Puebla tiene una alta presencia por las armadoras Volkswagen y Audi donde se incluyen robots inteligentes para aumentar su producción.
En Volkswagen estos sistemas automatizados se planearon para realizar inspecciones en 26 puntos críticos en menos de un minuto y se planteó ponerlo en práctica para la línea de Tiguan.
También está el caso de los cajeros en supermercados que cada vez más implementan un área de autocobro para sus consumidores.
En cadenas como la de Aurrerá, Walmart, Sam's y Comercial Mexicana se han abierto en los últimos años espacios para que los consumidores aprendan a utilizar esta tecnología con la guía de un solo trabajador.
Basta con escanear productos y pesar o cuantificar los que se venden por kilo, pieza o a granel para generar una cuenta total del consumo y pagar.
De esta manera se evita el empleo de cobradores de caja y hasta de los llamados "cerillos", que son adultos mayores.
Una situación similar también se ha observado en instituciones bancarias como Bancomer que, con los años, ha incluido más practicajas en sus sucursales.
Estos cajeros inteligentes permiten no sólo retirar dinero sino depositar cheques y altas cantidades en efectivo sin hacer fila de espera en el área de ventanillas o con ejecutivos.
Otros cajeros que tienden a desaparecer y que ya llevan muchos más avances son los relacionados con la seguridad en los estacionamientos de plazas comerciales y otros sitios de alta afluencia.
En la mayoría de ellos, el ticket ya lo entrega, cobra y recibe una máquina, por lo que el personal de seguridad que cobraba y sellaba boletos quedó en el pasado.
En la ciudad, sin embargo, todavía se observan algunos casos en donde operan personas a cargo de estos servicios como la Central de Autobuses de Pasajeros de la Ciudad de Puebla (CAPU).
Por otro lado, están los casos de los servicios de atención al cliente o a la ciudadanía en donde se utilizan chats robotizados o bien, máquinas instantáneas.
Los mismos se usan para hacer trámites, consumir agua embotellada, comida o líquidos de limpieza.
Incluso, el ayuntamiento de Puebla lanzó en marzo pasado su smartbot Ángela para resolver dudas de la población.
