Comida a domicilio: no, no era tan sencillo…

IMAGE: Kai Pilger - Pixabay

Uber Eats y Postmates (adquirida por Uber en julio de 2020) han sido declaradas culpables en la ciudad de Chicago por haber listado en sus aplicaciones de comida a domicilio a numerosos restaurantes sin su consentimiento, y condenadas a pagar diez millones de dólares, cinco de los cuales irán destinados a compensar a los más de dos mil quinientos establecimientos afectados, y otra parte a la administración para cubrir los gastos de la investigación de más de dos años que tuvo que llevar a cabo para demostrar los efectos de la política de la compañía. Hay casos similares planteados también en la ciudad de Chicago contra competidores de Uber Eats como Grubhub y DoorDash que aún no han recibido veredicto.

Las evidencias se acumulan: cuando, hace algunos años, múltiples compañías se abalanzaron sobre los servicios de envío de comida a domicilio como si no hubiera un mañana, lo hicieron en unas condiciones que se parecían más a las del salvaje Oeste que a las de un entorno razonablemente civilizado. Rápidamente, captaron a miles de trabajadores a los que obligaron a llevar a cabo su labor sin ninguna de las protecciones que llevábamos mucho tiempo consolidando como sociedad: en muchos casos, los trabajadores ponían su propio medio de transporte, trabajaban más horas de las debidamente reguladas, y renunciaban a derechos como paro, vacaciones o seguros.

La excusa era sencilla: vienes, te apuntas en la app, y empiezas a ganar dinero, sin más. En la práctica, eso escondía un subempleo en condiciones dramáticas, y aunque algunos trabajadores estuvieran a gusto con esa flexibilidad, muchos otros entraron en una dinámica por todos conocida: muchas horas trabajando para una compañía, pero sin derecho a nada. Si te accidentas, problema tuyo, haber tenido más cuidado.

Como es lógico, la administración ha ido regulando de manera cada vez más cuidadosa ese tipo de acciones, y ahora, cada vez más, ese tipo de trabajadores deben ser considerados empleados, y no simplemente «freelancers que pasaban por allí». El liberalismo salvaje tiene, o mejor, debe tener, algún tipo de límites.

Con los restaurantes, ocurre lo mismo: ¿quién diablos eres tú para decidir listar mi establecimiento en tu aplicación sin mi consentimiento, establecer un precio como te dé la gana, y cuando alguien quiere mis servicios, simplemente enviarme uno de tus trabajadores a la puerta con una bicicleta y una mochila? ¿Y si no me interesa? ¿Y si simplemente quiero tener más control sobre mi negocio? ¿Y si no quiero pagarte ningún tipo de comisión? ¿Quién eres tú para operar sin ningún tipo de respeto a la lógica empresarial, con el simple argumento de «esto no se hacía antes»?

Algunos de los emprendedores que hemos glorificado como sociedad por edificar compañías a las que llamamos «unicornios» han respondido, en la práctica, más a un patrón de aprovechar espacios poco regulados, o no suficientemente, para generar prácticas de muy dudosa legalidad o de muy dudosa ética. Cada vez más, a medida que conocemos los efectos de su funcionamiento, llega el momento de ir poniendo las cosas en su sitio.


This article is also available in English on my Medium page, «At last, the murky reality behind food delivery is being exposed»

19 comentarios

  • #001
    Manuel - 6 diciembre 2022 - 09:18

    Espera, espera, espera… Pero eso no es lo que en su momento dijeron los dueños de los diarios a Google News? O me estoy perdiendo de algo hoy que es feriado y es lo primero que leo?

  • #002
    Benji - 6 diciembre 2022 - 11:39

    No entiendo que un restaurante NO quisiera estar listado… pero hay que respetárselo.

    Las infracondiciones laborales hay que revertirlas y regularlas.

    Pero el «gratis» total del Glovo Prime, Uber Eats, etc. también se vendrá abajo. El negocio funciona porque a los usuarios nos interesaba que funcionase y nos importaba bien poco el ciclista.

    Lo que sí nos tenemos que hacer mirar como sociedad es si no estamos llevando la comodidad a precio 0 demasiado lejos. Las cosas valen lo que valen, y si sabemos que usan a migrantes sin papeles para pedalear por media ciudad, deberíamos hacérnoslo mirar.

    En los 90 podías pedir Telepizza a domicilio y eran 100-300 pesetas extras sobre el precio de venta. Pues era lo que había. La llamada de teléfono (fijo a fijo) también te costaba un dinero, fíjate tú.

    • JPR - 7 diciembre 2022 - 13:26

      Benji

      Razones por la que un restaurante no quiera estar en un servicio de Riders puede haber muchas.

      Por ejemplo

      a) Un restaurante puede establecer un criterio ético sabiendo que se explota a los Riders y por tanto en su responsabilidad corporativa, no contrata con empresas explotadoras

      b) Una cuestión de branding de empresa. Ese restaurante se puede responsabilizar de la calidad de la comida que sirve a sus clientes directamente en su local. Si por cualquier circunstancia la comida no llega a su destino en condiciones no quiere que se responsabilice al restaurante por ello

      c) Normalmente las empresas de delivery, exigen que el restaurante les haga una rebaja para incluir la comisión del servicio. Como sabes en paises como EEUU el sevicio no está incluido en el PVP del plato, por lo que no cabe una rebaja

      Creo que es claro que el beneficio que obtiene un restaurante es nulo.

      En el caso de tener un servicio de «Comida para llevar», entiendo que el restaurante decida No estar en listados de otras empresas si no se ha autorizado su inclusión.

      Y voy a abrir un melón, del mismo que debería poder restringirse por los restaurantes estar en listados de opiniones estilo trip advisor, etc. Donde todos sabemos que en realidad hay detrás una MAFIA manejando esos listados de opiniones. Si no que le digan a Enrique y alguno de sus artículos respecto a AMAZON

  • #004
    JPR - 6 diciembre 2022 - 11:56

    Neuralink, la empresa de Elon Musk, está bajo investigación en EE UU por posibles violaciones al bienestar animal

    Todo un síntoma que EEUU se preocupen más por sus animales que por sus «negros, hispanos, trabajadores de twitter, riders, etc»

    En cuanto a la estretegia de Uber-negreros que vamos a contar que no se haya descubierto ya en sus papeles. Parece cachondeo, el dorado de la mafia ¿Y uber actuando así? Como pez en el agua.

  • #005
    Javier Cuchí - 6 diciembre 2022 - 13:26

    Cada día se ve como algo más natural explotar a la gente. Por supuesto, las grandes corporaciones: véanse los ejemplos de esta misma entrada o recordemos a Elon Musk despidiendo brutalmente (brutalmente tanto en el fondo como en la forma). Esta manera de disponer del presente y del futuro de millones de familias (a veces, muchísimas decenas de miles en manos de uno solo) se acerca -o debería acercarse- al concepto de crimen contra la Humanidad.

    Pero lo grande no es eso; eso entra en lo que podríamos llamar normalidad histórica del liberalismo económico. Lo grande es la cantidad -ingente- de personas que pasan de explotados a explotadores con una facilidad que asombra y asusta. Empleados de relativamente bajo nivel, tienen en casa a una asistenta por horas en condiciones laborales vergonzosas y con exigencias de rendimiento que rozan lo espantoso. Yo lo veo en mi propio círculo de amigos (de ex-amigos, si detecto un caso extremo). Y la facilidad que tienen para justificarlo: que si va por libre, que si se busque la vida, que si oferta o demanda… O, efectivamente, utilizando servicios de reparto a domicilio como los citados, sabiendo que se trata de mano de obra casi esclava. Pero intenta regatearles a ellos algún derecho ya no legal o básico, sino prebendas o ventajas establecidas en el convenio del sector.

    Fue lo mismo que el low cost: a todos nos pareció maravilloso irnos al culo del mundo por dos pesetas o comprar en los bazares chinos porquería barata. Hasta que, claro, nosotros mismos acabamos siendo también low cost para las respectivas empresas.

  • #006
    Gorki - 6 diciembre 2022 - 15:11

    Hace poco estuve en Valencia, (a ver a la nieta) y mi hijo me llevo a cenar a un antiguo mercado cerca del puerto que ahora ha cambiado las tiendas por chiringuitos especializados en comida, asiática, hamburguesas, creps, postres, pescado,… y uno que vende las bebidas, tu vas a los que quieras y te lo comes en una de las mesa de mármol.

    Por lo visto las hamburguesas de ese sitio tiene fama en Valencia. Nos sentamos cerca de la puerta y me asombro ver que en el tiempo que cenamos, (una hora), pasaron montones de riders a buscar una cena para llevar a alguna parte,

    E mi se me hace raro, porque si queremos cenar por ahí, es en parte por salir y que nos de el aire, pero para cenar una hamburguesa en casa, ,… ¡No lo entiendo!. Es qué no tienen en su casa unos huevos y una lata de atún y se hacen una tortilla de atún en dos minutos. Entendería que pidieras un mariscada para celebrar un cumpleaños, pero una hamburguesa, comida viendo la televisión,…¡¡¡ Están locos estos Romanos !!!

  • #007
    Xaquín - 6 diciembre 2022 - 15:46

    «en la práctica, más a un patrón de aprovechar espacios poco regulados, o no suficientemente, para generar prácticas de muy dudosa legalidad o de muy dudosa ética.» (EDans).

    Cuando se habla de la colonización del Far West se suele olvidar que los colonos eran descendientes de europeos (y muy religiosos), que ya habían practicado el colonialismo, hard a tope, como «europeos», con el Imperio Romano (y los demás imperios europeos, incluída Rusia por supuesto).

    El abuso de la expansión digital, no tenía porqué responder a un distinto patrón de explotación, de un ecosistema redescubierto.

    Por otro lado, y volviendo al Far West, no olvidemos que ,esperar la comida en casa no nos equipara a los colonos desbrozando el West, realmente nos equipara a los potentados del East, esperando tranquilamente por los beneficios que le supone la explotación del Salvaje Oeste.

    Pagamos la comida, pero abusamos del sudor de los que la transportan hasta nuestra casa. «Ellos» son trabajadores por cuenta propia, nosotros «simples» explotadores de su fuerza de trabajo. Y eso, no hay ibuprofeno que lo calme.

  • #008
    Gorki - 6 diciembre 2022 - 20:14

    Desde luego es indignante que alguien quiera contratar los servicios de un trabajador si pagar al menos el sueldo mínimo, darle todas las herramientas que necesite para su trabajo y respetando tanto su horario de trabajo como los días de vacaciones que le correspondan.

    ¿Qué es eso de pagar a los riders por carreras que hagan ? ¡¡¡ Indignante.!!!

    Igual de indignante que tomar un taxi y pagar al chófer por UNA CARRERA, cuando tu lo necesitas y encima obligarlo a poner el vehículo, Si quieres un coche con chofer, te compara el coche y contratas al chófer. En la práctica, eso esconde un subempleo en condiciones dramáticas, no hay taxista que haga menos de 10 horas de trabajo, .

    Lo de las asistentas, como dice JAVIER CUCHÍ no se tan indignante, porque al menos las bayetas, el aspirador y el detergente, lo pagas tu, pero ¡Qué es eso de contratar por un par de horas!, ¡Acaso ella no comen todos los días!. Si quieres que te limpien la casa, contratas a un empleado por toda la jornada con seguro y vacaciones. Ese tipo de trabajadores deben ser considerados empleados, y no simplemente «freelancers que pasaban por allí».

    Y qué me dices de llamar a un fontanero el día que te hace falta, y si te accidentas, problema tuyo, haber tenido más cuidado. Contrata a un empleado para el mantenimiento de la casa y compra las herramientas que necesite.

    La paja en el ojo ajeno la ve cualquiera

    • Javier Cuchí - 6 diciembre 2022 - 21:32

      Me parece, querido Gorki, que confundes el trabajo por cuenta propia que el trabajo por cuenta ajena. El autónomo es, en el fondo, un empresario y, como tal, asume los riesgos de su desempeño. En cambio, es soberano en su negocio/trabajo: él decide cuántas horas trabaja, qué servicios presta o cuales no, qué herramientas utilizará habitualmente y cuáles no… Además, el trabajador autónomo no depende de una empresa, sino de varios clientes (otra cosa es la proporción de su trabajo/ingresos que cada uno representa). El trabajador por cuenta ajena no tiene poder sobre todo eso y se caracteriza, sobre todo, por la relación de dependencia que le ata al empresario. Y cuando al trabajador por cuenta ajena se le camufla como autónomo, estamos ante una infracción laboral, ante una inmoralidad y, en definitiva, ante lo que debería ser -teóricamente lo es, pero vete a saber…- un delito.

      Los trabajadores en régimen doméstico están perfectamente regulados por la ley: la asistenta que tenemos en casa trabaja X horas a la semana y, de acuerdo con la ley, cotizo por ella en la Seguridad Social y tiene derecho, en la proporción a estas horas, a sus correspondientes vacaciones y pagas extra. De su alta en Seguridad Social ya es implícito su seguro de accidentes y su asistencia médica. Mira bien en tu casa antes de entrar a ver qué pasa en la mía.

      El fontanero es, como he dicho antes, un autónomo y, como tal, cotiza a la Seguridad Social, teniendo, por tanto, cubierta su asistencia sanitaria, sus bajas por enfermedad y -creo recordar, no estoy seguro- incluso cobertura por desempleo al menos en ciertos casos.

      Tratar de cubrir el fraude laboral con la apariencia de trabajo/empresa autónomo es una vieja demagogia que ya está muy vista y muy pasada de moda. Mucho más que las pajas en los ojos.

      • Gorki - 6 diciembre 2022 - 22:33

        Francamente me cuesta mucho distinguir la diferencia entre pedir una cena a Glovo y pedir un taxi a radiotaxi. ¿Qué diferencia hay?

        El que algo este regulado, no indica que sea justo, Los taxistas para sacarse un jornal decente, tiene que trabajar tropecientas horas, y todos los sabemos y si el coche va al taller, pues se siente, no cobras y en paz y si quieres hacer vacaciones pues hazlas no faltaba mas.

        Si te fijas he copiado frases que se aplican a los riders

        Para el taxi, «·en la práctica, eso esconde un subempleo en condiciones dramáticas,»

        Para las asistentas. «Ese tipo de trabajadores deben ser considerados empleados, y no simplemente «freelancers que pasaban por allí».»

        Para los fontaneros, «y si te accidentas, problema tuyo, haber tenido más cuidado.»

        .

  • #011
    Alqvimista - 7 diciembre 2022 - 07:53

    Todo el sistema de transporte está podrido.
    Ahora me llama en domingo un repartidor para entregarme un paquete, por ejemplo. Las empresas de paquetería ya no contratan a nadie porque todos son autónomos. Puedo decidir encargar comida a un sitio u otro en función de si me lo entrega un chaval contratado o un raider esclavizado, pero no puedo decidir quién me va a entregar un paquete de una tienda online.

    En cuanto a los taxistas, no es exactamente lo mismo si el taxista trabaja sólo para él y no para un tercero. Como autónomo que soy desde 1998 trabajo ahora 6 horas al día, pero también he tenido épocas de trabajar 16. Pero soy yo quien decido hasta dónde me quiero implicar.

    En cuanto Glovo en particular, tuve una buena bronca en LinkedIn con un emprendedor al que le dije que la esclavitud ya estaba inventada y que eso no era innovar. Zanjó la discusión uno -que no consigo encontrar quién fue- diciendo que “si tu Plan de Negocio no contempla pagar salarios dignos entonces no tienes un Plan de Negocio”.

  • #012
    Alnair - 7 diciembre 2022 - 10:20

    Hace más de un siglo que este modelo de negocio lo implementaron ¡los periódicos de papel!

    Hasta ahora ningún periódico levantó la voz por los repartidores de periódicos.

    Algunos ya se están organizando para cambiar eso:
    https://www.chicagotribune.com/hoy/chicago/ct-hoy-alfrente-repartidores-de-chicago-tribune-demandan-20180905-story.html

  • #013
    JPR - 7 diciembre 2022 - 13:13

    Gorki

    Si soy un asalariado lo que vendo es mi tiempo. Y como tal se debe de dar un valor a ese tiempo

    Si soy un autónomo lo que se vendo es un servicio, y como tal se debe dar un valor de mercado a esa mercancia en forma de servicio.

    Son dos cosas distintas. Por ejemplo yo puedo solicitar a una empresa un asistente por horas, pero en realidad es una relación mercantil, de la que no tengo que preocuparme por poco más que la me exije la ley, por ejemplo como contratador que se cumplan las condiciones de RRLL.

    Pero si contrato a ese asistente directamente, debo además de preocuparme por dar a esa persona de alta en SS, tener un contrato con un salario que cumpla el SMI, unas nóminas, unas retenciones, etc.

    Es decir como empresario contratador podré optar por cual de las dos opciones me conviene más desde el punto de vista económico, simplicidad, etc

    En el caso de un conductor asalariado de un vehículo, lo normal es contratar a esa persona por unas 40h/semanales para que me cubra un turno. Y cumplir con lo que señalo arriba. Si es mucho o poco, será un problema como dueño del taxi si me conviene contratar o no. Y lo mismo para el asalariado. Habrá un equilibrio oferta y demanda

    Y finalmente tenemos el caso fraudulento de las personas que realizan recados, y es conocido como falso autónomo. En este caso el empresario aprovechado lo que dice es «voy a pagar a una persona por pedido realizado, una cuantía que es x, y como hay mucha penuria en mi país, entonces consigo realizar unos servicios a una fracción que lo que me costaría, si cumpliera con la ley y teniendo al trabajador dado de alta aunque sea con el mínimo legal. Con ese modelo el beneficio para el empresario aprovechado es claro, ahorro de costes, y paga solo cuando se realiza un pedido. Es decir, que el tiempo que está a su disposición una persona también va a su favor. Es una estrategia ganadora para el esclavista, como es obvio.

    Pero GORKI para evitar ese abuso está la legislación laboral que prohibe esa figura y que no es comparable al resto de ejemplos que has puesto. No solamente es un fraude a la persona que obligada por las circunstancias se ve obligada a su auto degradación sino que además es un fraude a la SS. Para identificar esta basura de neo esclavismo es sencillo:

    a) El valor del pedido lo establece la empresa. Son lentejas. Sea más o menos recorrido.
    b) El esclavo está esperando a que haya un cliente que realice un pedido. Esa espera es gratis total. Un asalariado debe tener fijo el horario de trabajo. Si está a disposición de su negrero es un falso autonomo
    c) El esclavo normalmente debe llevar sus medios de producción, por ejemplo bici, moto…
    d) Si tiene accidentes no está cubierto por el esclavista

    Si después de leer esto sigues creyendo que es lo mismo, vete a Optica San Gabino, que cuida tu cristalino…

    • Javier Cuchí - 7 diciembre 2022 - 14:48

      Plas, plas, plas, plas.

      Blanco y en botella, sí señor.

      • JPR - 7 diciembre 2022 - 16:05

        Ayer pusé o pensé un «Excelente comentario» a una de tus entradas.

        La realidad es que damos por hecho que los derechos, deberes y libertades que tenemos son algo GRATIS y no es así. Siempre habrá personas que no critiquen los abusos y lo vean una muestra de liberalismo, siempre habrá personas haciendo que las demás realicen los esfuerzos y ellos estén llevándoselo crudo.

        Y los peligros de la involución estan ahí, la última intento de golpe nazi en Alemania

        Detenidos en Alemania 25 miembros de un grupo de extrema derecha sospechosos de planificar un golpe de Estado

        Allí tienen marcado a fuego hacer el vacio al AfD ( el VOX alemán)

        ¿Y aquí que hace el anterior partido que nos gobernó? Y digo bien, no en que piensa, sino que hace

  • #016
    Dani - 7 diciembre 2022 - 14:01

    Perdone, señor, pero puede usted explicar como demonios una empresa va a listar a una restaurante sin su consentimiento? Y como estos restaurantes reciben repartidores preguntando sobre un pedido sin que estos restaurantes tengan la tableta y/o plataforma para aceptar o no el pedido hecho mediante la plataforma??? Perdona usted, pero si información es INVIABLE y totalmente confusa. No aclara absolutamente nada. Es vergonzoso que persona como usted se haga llamar periodista. Es denunciable.

    • Pilates - 7 diciembre 2022 - 16:02

      Se entiende que es la propia empresa rider la que hace el pedido en la plataforma del restaurante.

  • #018
    Luis - 8 diciembre 2022 - 00:44

    Menudo fiasco de compañía, en todo lo que toca.

  • #019
    Julio Map - 9 diciembre 2022 - 22:59

    100% de acuerdo en lo de ir en contra del infratrabajo.

    Si en la sociedad hemos entendido que los trabajadores tienen unos derechos «básicos», como las vacaciones, el no trabajar más de x horas a la semana, la cobertura cuando están de baja, la jubilación, etc… NO podemos aceptar que algunas empresas se hagan de oro a costa de no cubrir esos derechos, y hacer que los tengamos que cubrir los demás de forma supletoria.

    Debemos de obligar a que el que se tome la pizza pague la jubilación del que la transporta, aunque la pizza le salga más cara… lo contrario, es permitir que se ahorre ese dinero, y tenerlo que pagar luego los demás, porque entendemos que el rider es un ser humano.

    Claramente estos trabajadores son falsos autónomos, y aunque la línea sea sutil, hay que definirla y evitar que se traspase.

    Y mucho menos, cuando encima las que la traspasan son empresas extranjeras, que se llevan el beneficio de estra transgresión fuera de nuestras fronteras.

    Ahora… lo de que un «rider» no pueda vender comida del restaurante que quiera, a domicilio, me parece que es traspasar las barreras del libre comercio, del que tanto presume USA.

    Lo compro donde el cliente me diga, y lo vendo al precio que me costó, más un plus de transporte.

    Si el restaurante no quiere aparecer, que no me lo venda.

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