La inversión empresarial crece en todos los grandes países de la UE, pero cae en España

El Banco Central Europeo ha señalado a España como la única gran economía de la zona euro donde sus empresas no elevaron su inversión, todo un síntoma de incertidumbre. "La inversión distinta de la construcción aumentó en el segundo trimestre en todos los grandes países de la zona del euro, excepto España", señala la institución presidida por Christine Lagarde en su boletín económico, el informe de referencia que utiliza la institución para decidir su política monetaria, de amplio seguimiento entre los agentes económicos.

Esta negativa diferencia respecto al resto de países se da pese a ser España uno de los mayores potenciales receptores de fondos europeos de recuperación por el hundimiento que sufrió la economía nacional tras la pandemia. Según detalla el organismo con sede en Fráncfort, "la inversión ajena a la construcción aumentó un 1,8% intertrimestral en el segundo trimestre, ya que la fabricación de vehículos de motor se recuperó en un contexto de relajación gradual de los cuellos de botella en la oferta".

A diferencia de lo anterior, la automoción española, sector estratégico nacional que genera alrededor del 15% del PIB, dibuja un horizonte sombrío. Este mismo jueves, las dos principales asociaciones de fabricantes, Anfac y Sernauto, han manifestado "su preocupación ante la compleja y delicada situación que atraviesa la industria de automoción en nuestro país".

El presidente de Volkswagen, Wayne Griffiths, y el presidente de Gestamp, Francisco Riberas, piden un plan de choque al Gobierno ante lo que entienden es "un contexto de inestabilidad e incertidumbre sin precedentes". Precisamente, la incertidumbre es uno de los factores que más alejan la inversión de las empresas, que prefieren no arriesgar sus fondos con nuevas apuestas. En este sentido, el Índice de Confianza Empresarial de los dos primeros trimestres de 2022 sumó dos caídas consecutivas, según publicó el INE.

De hecho, dicha incertidumbre estaría detrás de la contracción de la inversión hasta junio, ya que las compañías españolas han mejorado con fuerza sus resultados en la primera mitad del año. Según un análisis publicado este jueves por el Banco de España, "en el primer semestre de 2022 la facturación de las empresas creció a una tasa muy alta, reflejo tanto de la recuperación de la actividad como del aumento de los precios de venta".

"A pesar del notable avance de los costes de producción, los excedentes empresariales se expandieron a un ritmo elevado, y se registraron ya niveles muy similares o incluso algo superiores a los existentes antes de la crisis del covid-19. Esta positiva evolución económica se tradujo en una mejora de la rentabilidad de las empresas y de su capacidad de repago de la deuda", señala el documento publicado por el organismo que lidera Pablo Hernández de Cos.

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Pese a lo anterior, el Banco Central Europeo vaticina un empeoramiento de la situación. "La incertidumbre relacionada con la guerra de Ucrania, el aumento de los precios de la energía, el mayor costo de financiamiento y el riesgo de racionamiento de gas implican una desaceleración sustancial en el tercer trimestre de 2022".

En línea con esta conclusiones, Red Eléctrica advierte de que las grandes empresas en España han reducido su consumo de luz para combatir los altos precios un 10% en agosto, especialmente acusado en la industria, lo que supone un retroceso récord desde marzo de 2020, cuando se decretó un confinamiento duro para combatir la pandemia.

"Aunque las condiciones de financiación siguen siendo favorables, el coste de los préstamos para las empresas ha aumentado considerablemente desde el comienzo de la guerra de Ucrania", advierte el BCE. El aumento de costes financieros se da en plena subida de los tipos de interés de los principales bancos centrales del mundo, como la Reserva Federal o el Banco de Inglaterra. El propio Banco Central Europeo ha ejecutado la mayor subida de tipos de interés de su historia este mes de septiembre, con una subida de 0,75 puntos.

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Pese al descenso, la institución monetaria de la Unión Europea espera que los fondos de recuperación Next Generation impulsen la inversión empresarial de cara a 2023. También en España, los fabricantes de automóviles y sus componentes aseguraban este jueves que "España debe utilizar de forma eficiente la llegada de los fondos europeos Next Generation EU".

El presidente de Volkswagen en España, representante de toda la industria del automóvil nacional a través de Anfac, señala: "España es el segundo fabricante de vehículos de Europa. Si queremos mantener esta posición y la competitividad de la industria de automoción, y seguir atrayendo inversiones al país, hay que aprovechar de forma eficiente la llegada de los fondos europeos".

Problemas con los fondos europeos

Sin embargo, España está demostrando por ahora no ser capaz de ejecutar todos los fondos comunitarios comprometidos a fondo perdido. Según un reciente análisis de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), la tasa de ejecución definitiva sobre el total presupuestado en 2022 se situaría en el 5,2%. "Aunque cabe esperar que estas cifras mejoren en los próximos meses, por el momento apuntan a una ejecución poco ágil que podría no completarse en los plazos previstos".

En su boletín de seguimiento de las inversiones del plan de recuperación, Fedea asegura que la ejecución del plan "comienza a ofrecer motivos para una cierta preocupación" y añade, pese a reconocer el esfuerzo de la Administración, que "algunos de los resultados dejan bastante que desear".