El estado de alarma no permite en sus especificaciones el confinamiento de la población ni por dos semanas ni durante el fin de semana. El ministro Salvador Illa ha dejado claro esos límites y Salut, que estudiaba esas medidas para frenar el crecimiento disparado “crítico e insostenible”, no ve claro tomar esa opción al margen del estado de alarma, porque podría ser tumbada por el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya. Los diferentes borradores que se suceden en las últimas 48 horas recogen toda clase de limitaciones, salvo aquella.
El cierre perimetral, a nivel municipal o de región sanitaria o de todo el territorio catalán, que impide los traslados fuera del perímetro marcado, es una de las opciones seguras a partir del viernes. Esa decisión, que se tomará hoy, reduce la movilidad drásticamente, visto lo poco que se ha conseguido con las recomendaciones de solo salir lo imprescindible comunicadas hace dos semanas.
La dimensión del perímetro podría ser distinto según las zonas, teniendo en cuenta por ejemplo las ciudades con contagios más desbocados o en mayor progresión. O podría optarse por igualar para todos. Las cifras en todo el territorio están muy por encima de las tasas de riesgo extremo, salvo en las comarcas menos habitadas, como el Pallars Jussà, Alta Ribagorça y Terra Alta. Las demás superan con creces el límite de 250 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días. Algunas multiplican por más de tres.
No se confina
“Ni de un día, ni de dos días, ni de fin de semana”, zanjó el ministro Salvador Illa
Así que ante tanto contagio en todas las poblaciones, las medidas serán probablemente muy comunes a todos. Lo que están valorando los técnicos y el propio Govern es el grado de limitación de los contactos que habrá que imponer para sumar efectividad a la limitación de movilidad: parques, cines, teatros, pistas deportivas, centros comerciales, cualquier punto de encuentro podría ser sujeto de reducción o directamente cierre. Como seguirán bares y restaurantes, cerrados desde hace dos semanas. Solo quedarán preservadas las escuelas, la enseñanza obligatoria. Bachillerato y formación profesional con limitaciones de presencia y la Universidad, telemática como desde hace dos semanas.
Este miércoles, varios miembros del Govern mantuvieron contactos tanto con expertos de Salut como de Protecció Civil . De la reunión, que duró cuatro horas, según fuentes del propio Govern, poco trascendió, más allá de la constatación de que el cierre de los ciudadanos de Catalunya en sus casas por la vía de un decreto ley pasa a ser una opción descartada ante el temor de que el juez responda con una negativa. En este sentido, el ministro Salvador Illa explicó que el confinamiento domiciliario no es posible con el estado de alarma para el cual el Gobierno debe recibir hoy la luz verde del Congreso: “Ni de un día, ni de dos días, ni de fin de semana”, zanjó el titular de Sanidad en TV3. “Las posibilidades de actuación en base al estado de alarma son lo bastante contundentes para tomar medidas para contener y reducir los contagios”, aclaró el responsable de Sanidad.
¿En qué medida es posible que una autonomía pueda decretar un cierre domiciliario tratándose de una restricción de los derechos fundamentales? La pregunta podrá responderse definitivamente con la articulación del nuevo estado de alarma que prorrogue al actual, del que el Gobierno ha avanzado “que no contendrá restricciones específicas”.
